
En los últimos años, nuestras vidas en línea y en la nube han cambiado, pues ahora solemos comprar en línea, administramos nuestras cuentas bancarias, socializamos, compartimos fotos e incluso hablamos con nuestro médico a través de una gama de aplicaciones innovadoras y fáciles de usar. Todo esto lo hacemos a través de una variedad de dispositivos, desde la confiable PC doméstica hasta tablets, smartphones y otros dispositivos portátiles inteligentes.
Esto tiene implicaciones para la seguridad; pues, a medida que aumenta el número de contraseñas, dispositivos y cuentas, nuestra capacidad para realizar un seguimiento de todos estos activos digitales disminuye. En ocasiones terminamos recurriendo a soluciones rápidas, pero poco seguras, como reutilizar contraseñas o incluso ignoramos las advertencias de seguridad por completo.
Un error humano como este es habitual. En el trabajo, el error humano es responsable de aproximadamente el 82% de todas las filtraciones de datos corporativos. Sin embargo; esta falta de conocimientos en ciberseguridad también puede tener consecuencias en nuestra vida personal, poniendo en riesgo nuestros datos y dispositivos. Una investigación descubrió 24 mil millones de combinaciones robadas de nombre de usuario/contraseña circulando en los mercados clandestinos de la dark web en 2022.
¿Cuáles son los principales errores de seguridad digital que debemos evitar?
- Hacer clic en enlaces y abrir archivos adjuntos en mensajes no solicitados: También conocidas como phishing, estas misivas falsificarán a un remitente legítimo como un banco y requerirán una respuesta urgente del destinatario. Estos mensajes generalmente conducirán a una descarga encubierta de malware, o de lo contrario buscarán que la potencial víctima entregue información personal confidencial y posiblemente financiera. Siempre mantente escéptico de los mensajes no solicitados y no hagas clic en enlaces ni abras archivos adjuntos en ellos.
- Omitir actualizaciones: Mantener actualizada nuestra computadora y el resto de los dispositivos que utilizamos es fundamental para nuestra seguridad. A través de las actualizaciones los fabricantes lanzan parches para corregir una vulnerabilidad de seguridad específica que los cibercriminales aprovechan para atacar dispositivos y cuentas. Vale la pena tener activadas las actualizaciones automáticas para el sistema operativo, navegadores, aplicaciones y software instalado.
- Conectar dispositivos USB de terceros: Pese a ya no ser tan populares como antes, estos dispositivos todavía puede ser un transmisor eficaz de malware si se conecta a tu máquina; por ello, nunca conectes a tu equipo ni al de un tercero una memoria USB que no sea tuya.
- Uso y reutilización de contraseñas débiles: Este es el error más común que cometen los usuarios, pues las contraseñas débiles son cortas y fáciles de descifrar para los cibercriminales. Con esta información, los atacantes intentarán secuestrar una cuenta en particular y cualquier otra con la que compartas las mismas credenciales. Las contraseñas deben ser largas, seguras y únicas.
- No activar la autenticación en dos pasos (2FA): Las organizaciones vienen obligando a su personal a utilizar este tipo de autenticación para agregar una capa extra de seguridad aparte de las contraseñas. Esta medida le dificultará a los cibercriminales acceder a una cuenta por más que tengan la contraseña. Sin embargo, muchos de nosotros cometemos el error de no activar esta capa de seguridad adicional para proteger nuestra información personal.
- No hacer una copia de seguridad (backup): Este es un hábito de seguridad básico que muchos descuidan. Hacer copias de seguridad de forma regular y mantener una de estas copias sin conexión a internet puede ser de gran ayuda ante cualquier pérdida datos ya sea accidental o en el caso de una infección con ransomware.
- Usar y compartir dispositivos de trabajo para uso personal: Con la era del trabajo remoto e híbrido muchos de nosotros pasamos más tiempo trabajando desde casa. Esto hace que sea más tentador usar el dispositivo corporativo para tareas personales lo que podría poner en riesgo a tu empleador, y potencialmente a tu trabajo, ya que si el dispositivo se infecta con malware los cibercriminales pueden acceder a las redes y aplicaciones corporativas.
- Ser complaciente: Uno de los mayores desafíos con la seguridad es que es probable que los usuarios piensen que todo está bien, hasta que sea demasiado tarde. Confiamos en las empresas con las que hacemos negocios y en los proveedores de tecnología cuyos productos utilizamos todos los días; sin embargo, debemos tomarnos el tiempo para mirar la configuración de seguridad de los dispositivos.
- No utilizar software de seguridad en todos los dispositivos: Muchos de nosotros apreciamos utilizar un software de seguridad de buena reputación. Pero no solemos instalarlo en todos los dispositivos cuando son los smartphones y tablets los que están más expuestos.
Nuestras vidas digitales son cada vez más importantes para nosotros. Debemos protegerlas dando a la seguridad digital el tiempo y la atención que merece. Encuentra un proveedor en el que confíes y asegúrate de que todos tus equipos y dispositivos estén protegidos.
*Fuente: America-retail