
T-Mobile anunció que piratas informáticos accedieron a los datos de 37 millones de sus clientes, en una declaración presentada el jueves ante la Comisión de Bolsa y Valores. La masiva brecha de seguridad afecta tanto a cuentas de clientes de prepago como de pospago, y es el segundo hackeo notable en menos de dos años. La empresa ha declarado que está en proceso de notificarlo a los afectados.
Las (más o menos) buenas noticias: T-Mobile ha afirmado que la información financiera confidencial de los clientes, como números de tarjetas de crédito y de la seguridad social, no formó parte del ataque. En su lugar, según la empresa, los delincuentes sólo pudieron recopilar datos de cuentas como nombres, direcciones de facturación, correos electrónicos, números de teléfono, fechas de nacimiento y datos específicos de la línea telefónica.
Aún así, son muchos datos para que los ciberdelincuentes se hagan con ellos, y los clientes de T-Mobile deberían ser conscientes de que su información personal podría estar ahí fuera.
Al parecer, los piratas informáticos pudieron acceder a los datos a través de una única interfaz de programación de aplicaciones (API), un software que permite que varios programas informáticos se comuniquen entre sí. Los delincuentes accedieron a la API de T-Mobile sin autorización.
El proveedor de telecomunicaciones dijo que detectó por primera vez el pirateo el 5 de enero, y puso fin a la actividad maliciosa menos de un día después, con la ayuda de apoyo externo de ciberseguridad. Sin embargo, en ese momento, la brecha ya llevaba más de un mes.
La empresa señaló que cree que los hackers entraron por primera vez en la API afectada alrededor del 25 de noviembre de 2022.
"La actividad maliciosa parece estar totalmente contenida en este momento", escribió la compañía en la presentación del jueves, pero agregó que continuaba investigando lo sucedido.
Este último ataque no es ni mucho menos el único al que se han enfrentado T-Mobile y sus clientes en los últimos años. En agosto de 2021, la empresa admitió una filtración aún mayor que afectó al menos a 48 millones de clientes (aunque una demanda colectiva posterior alegó 76 millones y los piratas informáticos afirmaron que la cifra estaba más cerca de los 100 millones). Anteriormente, T-Mobile también sufrió violaciones de datos en 2020, 2019, 2018 y 2015.
El fallo de seguridad de 2021 hizo que T-Mobile pagara un acuerdo de 500 millones de dólares. 350 millones de ese dinero se destinaron a los clientes afectados, mientras que los 150 millones restantes se designaron para impulsar la seguridad digital de la compañía.
"En 2021, comenzamos una inversión sustancial de varios años trabajando con expertos externos líderes en ciberseguridad para mejorar nuestras capacidades de ciberseguridad y transformar nuestro enfoque de la ciberseguridad", señaló la compañía en la divulgación de la brecha de esta semana. "Hasta la fecha hemos hecho progresos sustanciales, y la protección de los datos de nuestros clientes sigue siendo una prioridad absoluta. Seguiremos realizando importantes inversiones para reforzar nuestro programa de ciberseguridad", añadió.
Fuente: gizmodo